Bueno, ya se terminó la segunda
fase de la campaña electoral y ahora empezamos la tercera fase. En esta, toca
hablar de lo que casi nadie quiso: los pactos y sus condiciones. Que nadie
piense que la tela está cortada. Ahora solamente se han tomado las medidas, y
ya se ve que a Podemos le tira del costado nacionalista, al PP le aprietan las
sisas, al PSOE ya no le pueden sacar más bajos, a IU le han metido un poco más el
dobladillo de escaños a pesar de dar la talla y a Ciudadanos el traje le quedaba
grande.
Si todo marcha como debe de
marchar en pura lógica (salvo crisis de responsabilidad en el PSOE, de esa que al
final le hace “responsable” colateral o bien cruce de navajas), en unos meses elecciones, con todos ya
retratados. Y aquí vendrá el baile definitivo. Podemos hasta el momento ha sido
el caballo de Troya del independentismo. La frase completa era, “no más
desahucios, no más empleo precario, no más corrupción, no más casta y caspa, dos huevos duros y referéndum
de autodeterminación". Dicho en breve, “te regalo un
jamón y venga la autodeterminación”. Hasta ahora parte de su electorado joven se
ha fijado en el jamón y no cayeron en la cuenta que eran vegetarianos por la
parte de la autodeterminación. Según discurso junto al museo Reina Sofía, eso
es un “in”. Puede ir sabiendo que ese “in” va ser de la más “pop” que dará
marcha a lo “retro” y le puede fastidiar
el “disco” de embrague con los nuevos electorados que buscan lo nuevo.
En definitiva, ahora sí. Terminó el calentamiento y comienza el baile.
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